Alivian y reducen el dolor y la inflamación de las encías.
Los de silicona suelen tener colores vivos y texturas que ayudan al desarrollo cognitivo y sensorial del bebé.
Estimulan el desarrollo de la motricidad ya que ejercitan los músculos de las manos favoreciendo la coordinación de la mano-boca.
La silicona alimentaria es un material seguro libre de BPA que evita la acumulación bacteriana. Además son muy fáciles de limpiar.
Están diseñados para poder refrigerarlos en la nevera.
